Cuando el CLUB lo apuesta todo a una carta y encima no depende el el lo único que puede hacer es cuidar los "detalles" pero son tantos, tan importantes y deciden tanto el resultado final, que la recompensa que ha tenido ha sido la mayor decepción de su historia.
Como ENTRENADOR el mayor de los fracasos, por el nivel futbolístico de la plantilla, pues parece ser que el mensaje que se les daba a veces "gritando" o no lo entendieron o no le hicieron caso. Pocas veces mas se podrá repetir esta oportunidad
Como JUGADOR, grandes momentos en la primera mitad, grandes desilusiones en la segunda vuelta. Tiene como equipo mucha responsabilidad de lo bueno y sobre todo de lo malo, y el "karma" les devolverá a cada uno lo que ha sembrado (muy diferente claro es cada caso)